¿Sudar más adelgaza? A pesar de todo lo que hayas oído, ¡no! Sudar más no te hará perder más grasa. ¿Quieres saber por qué? Vamos a verlo en este artículo.
¡Rompiendo mitos! Creo que el hecho de relacionar la sudoración con la pérdida de grasa es uno de los mitos más extendidos y peligrosos del sector del fitness. Veamos por qué…
¿Qué ocurre cuando sudamos?
La transpiración (o el sudor) se produce cuando nuestro cuerpo excreta agua y sales disueltas de nuestras glándulas sudoríparas junto con una pequeña cantidad de urea. Es el mecanismo que tiene nuestro cuerpo para refrigerarse y eliminar toxinas, por lo que es una señal de que el organismo puede regular su temperatura de forma eficiente. Por eso realmente la sudoración es un proceso muy importante.
Sin embargo, sudar no tiene nada que ver con la quema de grasa y no existe ninguna relación entre la cantidad que sudamos y la grasa que perdemos.
Piensa una cosa: más del 70% del cuerpo humano es agua, por lo que si sudamos excesivamente, el peso que perderemos serán fluidos, no grasa, y lo recuperaremos en cuanto volvamos a ingerir líquidos.
¿Qué pasa con la grasa?
La grasa se encuentra almacenada principalmente en el tejido adiposo. Pues bien, durante el ejercicio, los ácidos grasos se movilizan a partir del tejido adiposo y son transportados hasta el músculo, atravesando la membrana celular y llegando a la mitocondria, el orgánulo celular donde se produce la beta-oxidación (comúnmente conocida como “quema de grasas”), para ser utilizados como energía.
En otras palabras: la grasa se emplea como fuente de energía cuando realizamos ejercicio y se OXIDA, NO SE SUDA.
Conclusiones:
- Cuando sudas, pierdes agua y sales minerales, que se recuperan en cuanto te hidratas de nuevo.
- La báscula no puede saber si el peso que has perdido corresponde a líquidos, grasa o masa muscular, así que no te obsesiones con el número que marque.
- El sudor es un mecanismo termorregulador. Es decir, sudamos por el aumento de nuestra temperatura corporal y la necesidad de transpirar para reducirla.
- Empleamos la grasa como fuente de energía cuando realizamos ejercicio. Así que ponte las pilas y muévete más.
- La grasa no se adelgaza, se oxida. Y esto ocurre cuando hay un déficit calórico o un aumento del gasto energético.
- Olvida las promesas milagrosas, las fajas reductoras, los batidos detox y céntrate en comer bien y entrenar la fuerza.
- Por supuesto, no hagas locuras para sudar más, ya que puede ser peligroso para tu salud y producirte deshidratación e hipertermia, aparte de muchos otros problemas en tu sistema nervioso, el corazón, el equilibrio electrolítico, etc.
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Cuida tu cuerpo y que nadie te engañe ?.
Excelente artículo. Super ilustrativo 😀 más para las que vamos empezando y todavía creemos muchos mitos jaja muchas gracias por compartir
¡Gracias por tu comentario Rocío! Me alegro mucho de que te haya sido útil 😀
Acabo de tropezarme con tu blog buscando algo en google y realmente tengo que decir que me encanta 🙂 Estoy tan contento de haber encontrado tu sitio! Definitivamente tienes un lector más.
¡Muchas gracias por tu comentario Rebeca! Encantada de tenerte por aquí. Me alegro de que te resulte útil 🙂
Un abrazo,
Laura