Puede que al leer el título hayas pensado: “¿Batch qué?” ¡Pero tranquila! Te aseguro que en cuanto descubras en qué consiste el batch cooking y cómo te puede ayudar a comer mejor ahorrando tiempo y dinero, no querrás sacarlo de tu vida.
El batch cooking, también conocido como meal prep, no es más que una técnica para comprimir todas las horas que dedicas a la cocina a lo largo de la semana en una sola sesión de unas 2 o 3 horas.
Te voy a ser sincera. Lo practico desde hace varios años y te puedo decir que me da la vida. Y es que el hecho de levantarte de la cama, por ejemplo un martes, y tener el desayuno listo o el táper de mediodía preparado en un minuto, no tiene precio. Abrir la nevera y encontrar todo lo que necesitas comer ya cocinado, te permite invertir el tiempo que dedicarías a cocinar en otra cosa.
Así que, si tu día a día es tan loco como el mío, pasarte dos horitas en la cocina el domingo te acabará sabiendo a gloria.
Eso sí, por experiencia sé que, si no te organizas bien y tienes todo muy claro antes de empezar, acabarás perdiendo más tiempo y tu cocina y tus comidas serán un caos. Por eso te voy a contar las cosas que he descubierto que son clave para hacer un buen batch cooking.
1. Por qué el batch cooking te ayuda a comer mejor ahorrando tiempo y dinero
La respuesta es rápida y sencilla: ahorras tiempo porque agrupas todas las horas de cocina de la semana en una sola sesión de no más de 2 o 3 horas y gastas menos dinero en la compra porque vas al supermercado con una lista cerrada con los alimentos que realmente vas a utilizar y consumir. Nada de comprar “porsiacasos” y malgastar dinero en cosas que acaban en el fondo de la despensa caducadas.
Y, ¿por qué comerás mejor? Simplemente porque al no tener que improvisar cuando llegues tarde a casa, evitarás precocinados y ultraprocesados, y tu alimentación será mucho más saludable. Será abrir la nevera, calentar y comer.
2. La clave está en la planificación
Planifica, planifica y planifica. Vale, sí. Es un rollo sentarse media hora a pensar y organizar menús para toda la semana, pero te aseguro que, si no lo haces, tu batch cooking será un fracaso.
En cambio, si tienes claro lo que vas a comer cada día, ponerte manos a la obra en la cocina será un momento.
3. Opciones básicas para preparar batch cooking
A mí se me ocurren dos formas básicas:
- Puedes dejar listos todos los menús en recipientes individuales y olvidarte durante toda la semana.
- O también puedes guardar los alimentos por separado e ir montando el menú cada día. Esta es mi opción preferida porque me permite improvisar dentro de la planificación.
Tú decides qué opción se adapte mejor a ti.
4. ¡Al lío! ¡Organízate en la cocina!
Mi consejo es que, una vez tengas claro lo que tienes que cocinar y tengas a mano los ingredientes, te organices en la cocina.
Para ello, te propongo empezar con los desayunos y los snacks. Por ejemplo, puedes dejar preparado un recipiente con porridge de avena para 3 días y unos yogures con semillas de chía para los otros dos. No necesitarás más de 10 minutos. Otra opción que yo exploto mucho es dejarme fruta cortada en un táper. Va genial para esas frutas grandes como la sandía o el melón, que da una pereza infinita cortarlas.
Una vez tengas los desayunos, céntrate en las verduras y hortalizas que vayas a consumir. Una manera muy fácil de hacerlo es preparar cremas o sopas vegetales para unos días y pisto o verduras salteadas al wok para el resto.
Hasta aquí fácil, ¿verdad? Pues bien. Como en tu menú no pueden faltar los hidratos, solo tienes que poner una olla con agua a hervir y cocer pasta, arroz, quinoa o legumbres, por ejemplo. Yo suelo preparar dos tipos distintos de cereal cada semana para ir variando pero, un vez más, es cuestión de gustos y de cuánto te cueste repetir comidas o no. Eso sí, que cocines pasta y arroz para toda la semana no tiene por qué significar que comas arroz y pollo todos los días. ¡Ni mucho menos! Simplemente dale a tu imaginación y combina los alimentos para crear platos distintos. Por ejemplo, pasta a la boloñesa, ensalada de pasta, arroz con tomate, arroz setas y bacalao… Las opciones son infinitas.
Para acabar, céntrate en cocinar tus alimentos proteicos, ya sean de origen animal o vegetal. Yo he probado muchas maneras y la verdad es que todas funcionan muy bien. Puedes cocinar a la plancha, al horno o hacer guisos. Tú decides. Si quieres rapidez, la plancha no será tu mejor opción, ya te lo digo 😊
5. Cocina siempre un poco más de cantidad
Es mejor que te asegures de que no te va a faltar comida. Además, si ves que te sobran cosas antes de acabar la semana, puedes congelarlas para que no se echen a perder y aprovecharlas más adelante. ¡Faena que te ahorrarás en próximos batch cookings!
6. Haz la compra de una vez
La manera más eficaz para hacer la compra es haciéndola de una vez. Otro tip muy útil es que. Si compras verdura fresca, lávala y córtala toda a la vez.
7. Asegúrate de tener una buena colección de tápers
Parece obvio pero a todos nos ha pasado que, llegado el momento, nos han faltado recipientes para almacenar todas las preparaciones. ¡Así que tenlos preparados antes de empezar!
¿Cómo lo ves? ¿Te apuntas al batch cooking?
Por cierto, si quieres ideas de platos saludables, puedes descargarte este PLAN con menús y la planificación de entrenamiento para una semana, si todavía no lo has hecho 😉
Información relativa a los datos que proporcionas al dejar tu comentario
Responsable: Laura Martínez Linde +info
Finalidad: moderar los comentarios en el blog. +info
Legitimación: tu consentimiento, mediante marcación de botón. +info
Destinatarios: servidores de Webempresa (actual hosting de esta web).+info
Derechos: por supuesto tendrás derecho, entre otros, a acceder, rectificar, limitar y suprimir tus datos.+info